El apoyo emocional a los pacientes con cáncer es fundamental sobre el tratamiento de esta enfermedad
Con que diga un médico la palabra cáncer puede causar un gran efecto en una persona.
Al diagnosticar esta enfermedad el paciente entrará a un viaje largo que puede afectar su salud física, su bienestar mental y las relaciones con sus seres queridos. Durante el tratamiento es importante que los pacientes sean acompañados para sobrellevar los problemas emocionales asociados con el cáncer. Una de las mejores cosas que un paciente puede hacer para mejorar la calidad de vida es aprender más sobre el cáncer que padecen para que la enfermedad sea menos misteriosa y temible.
Los pacientes no deben tener miedo de decirle a sus doctores lo que están sintiendo, especialmente si esto involucra preocupaciones. Es muy importante buscar ayuda de un especialista cuando hay cambios que causan malestar o infelicidad.
La familia más cercana, cónyuges, hijos, padres, hermanos y amigos han de ser el principal apoyo de los enfermos con cáncer. También pueden contar con terapeutas que escuchen y atiendan a sus necesidades y preocupaciones. Todos ellos deben ser sensibles a los deseos del paciente de compartir y conocer información sobre el cáncer, las opciones de tratamiento, y su pronóstico.
Una red de apoyo puede ayudar a reducir en gran medida el estrés de lidiar con el cáncer. Los pacientes no deben sentir miedo al pedir ayuda de sus seres queridos y amigos. Pueden ayudarle en la vida cotidiana legue, para por ejemplo recoger y atender a sus hijos, alimentarles o simplemente estar dispuestos a escuchar sus inquietudes.
Una falta de apoyo por parte de la familia y el entorno más cercano al paciente ha sido asociado con mayores niveles de ansiedad y una menor calidad de vida.
También es importante la habilidad de los miembros de la familia para expresar abiertamente sus sentimientos y pensamientos al paciente porque la depresión podría entrar en juego también. La ansiedad también es menos común en los pacientes que son capaces de comunicar libremente información a su familia. Un dato preocupante es el hecho de que los pacientes con cáncer que carecen de apoyo social tienen un mayor deseo de morir y un mayor riesgo de cometer suicidio.
Evidentemente el mejor grupo de apoyo es la familia y los amigos, ellos constituyen las verdaderas raíces afectivas. Cuando son sanas y se nutren de amor son el mejor remedio para el buen estímulo de los cuidados clínicos del enfermo de cáncer.